La constitucion y su uso como papel higienico

Este titulo, un poco sugestivo no es mas que la radiografía de una cultura propia de la idiosincracia de nuestro pueblo. Todos desde los más altos sectores del poder politico y economico, hasta el menos pudiente de los habitantes del barrio con mas alto nivel de atrazo en el país; todos con muy pocas excepciones vivimos en la cultura aquella del "chivo sin ley"; todos sin distinción nos hemos referido a que la constitución es un "pedazo de papel" y que esas cosas solo figuran en los libros de historia y en las clases de los profesores de sociales. Ya que en la practica y en el diario accionar todo el mundo hace lo que se le viene en gana, porque la "autoridad" permite todo cuando a uno se le puede ocurrir.

Nuestros gobernantes a traves de la historia; algunos con mas desfachatez que otros (Por ejemplo el Dr. aquel que lo dijo en más de una ocación) se han encargado de que esa cultura se siga propagando. Las modificaciones a nuestra carta magna son siempre coyunturales y producto de situaciones determinadas, sin mencionar que cada vez que alguien intenta hacer una reforma constitucional seria y con responsabilidad, es tildado de estar adelantandose a los tiempos, como si nuestra patria estuviese condenada a pasar sus dias en el atraso sin poder aspirar a transforamaciones revolucionarias que cambien el orden de las cosas. Pareciera como que la gracia divina nos ha entregado este calvario de tener un pais con construcciones e infraestructura del sigrlo XXI y con un organigrama estatal, juridico y sobre todo con un sentido de aplicacion de las leyes digno de un Burundi (Sin Ofender) o un pais africano cualquiera.

Entonces caemos al momento actual, nuestro presidente impulsa una reforma constitucional "minusiosa" y "sistematica" para asi realizar una revolucion "democratica" que solo él se atreve a bautizar como tal; que podemos esperar de esta modificación: Mas de lo mismo; simplemente porque los actores son los mismos, es el mismo escenario de las veces anteriores y se mueven los mismos intereses que en las ocasiones previas. Cuanto quisiera estar equivocado pero lamentablemente las probabilidades que nuestra nueva constitución termine en el sanitario de estos politicos nuevos, y que su uso como papel higienico sea igual al de las anteriores, son casi como decian los galleros: "De peso a moriqueta".